sábado, 27 de marzo de 2010

LA CREATIVIDAD EN NEGOCIOS ES SINONIMO DE RIESGO (Por Opolop Red)

Solo una confianza indestructible en uno mismo y una dosis de irresponsabilidad controlada de enfrentar el riesgo a lo desconocido es lo que distingue a los grandes emprendedores y empresarios de aquellos tibios gerentes y administradores.Cuando a través de la creatividad aparecen opciones de gran divergencia en el tablero de oportunidades de una empresa esta debe estar preparada, en lo material, intelectivo y espiritual, a afrontar las consecuencias que con ella devengan.Estamos hablando de gran divergencia, no de creatividad de aplicación incremental.Aunque es justo decir, y aunque a veces parezca contradictorio, que las grandes nuevas ideas sobrevienen de emprendedores que tienen mucha ambición y todo por ganar y nada por perder.El “prestigio” que envuelve a muchas compañías, especialmente del Fortune 500 les impide poner en juego sistemáticamente ese halo de prestigio, con la consecuencia de escapárseles de las manos grandes innovaciones.El riesgo es inherente a la actividad creativa. Es la no aceptación de lo establecido por ir en busca de lo nuevo. La estimulación de prácticas de curiosidad, imaginación y divergencia no tendrán razón de ser en empresas que no tengan la suficiente valentía de hacerse cargo de las elucubraciones nuevas que provocan en su personal.Ante tal situación es mejor no hacer. Estimular la creatividad para que las ideas caigan en saco roto es mucho peor que no hacer nada.Corrieron riesgos Walt Disney con su Blancanieves, Jeff Bezos con su Amazon, Fred Smith con su Federal Express, Henry Ford con Ford Motors y cientos más.La aceptación del riesgo entraña una absoluta convicción en las creencias de los generadores de las nuevas ideas. Esa convicción es tan interior que puede ser que el mundo entere se ubique detrás de negativas como: “ no va a funcionar”.Walt Disney no conseguía inversionistas, Fed Smith se sacó una pobre nota en su tesis acerca de la oportunidad de Federal Express, Henry Ford fue aconsejado fervientemente de no invertir en la industria automotriz.Solo una confianza indestructible en uno mismo y una dosis de irresponsabilidad controlada de enfrentar el riesgo a lo desconocido es lo que distingue a los grandes emprendedores y empresarios de aquellos tibios gerentes y administradores.Como dijo el periodista David Brinkley. “Una persona exitosa es aquella que puede crear unos sólidos cimientos con los ladrillos que otros le lanzan para tratar de derribarle”.Temer al riesgo es temer a la oportunidad.La oportunidad no es para temerosos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario