viernes, 8 de julio de 2011

"¿POR QUE QUIERES SER RICO?" (Por Isabel Sales)

"Si el dinero es tu esperanza para la independencia, nunca la tendrás. La única seguridad real que un hombre puede tener en este mundo es un reserva de conocimiento, experiencia y habilidad. " Henry Ford


¿Por qué quieres ser rico/a? ¿Por qué es importante para ti tener mucho dinero?
¿Te sientes un poco incómodo al tratar de explicarlo?
¿Tu argumentación es más una justificación que una explicación del derecho de serlo?

Es normal. En la sociedad occidental actual vivimos en una constante contradicción: queremos tener dinero, mucho dinero, pero al mismo tiempo éste se considera como algo oscuro, que puede ensuciar la dignidad de la persona. Y nos ocurre lo mismo que le pasa a cualquier cuerpo sometido a dos fuerzas de sentido opuesto: no avanzamos.

La planificación financiera comporta tanto un aspecto emocional como uno intelectual, por lo que exige un doble abordaje: técnico y psicológico/espiritual. Por eso uno de los objetivos prioritarios es cambiar interiormente para ser capaces de cambiar exteriormente con la aplicación de técnicas y estrategias concretas.


Respondiendo a la pregunta que da título a este artículo, se pueden resumir en tres los motivos por los que una persona quiere ser rica:

1-Cambiar su estilo de vida: una casa más grande, un coche, caprichos, viajes, más tiempo con la familia, etc.

2-Contribuir a realizar un mundo mejor: ayudar a las personas con dificultades, crear una fundación etc.

3-Desarrollarse como persona. Para convertirte en un persona rica tienes que aprender a ser primero más fuerte mental y emocionalmente; hacer frente a desafíos, alcanzar metas, adquirir buenos hábitos, etc. ¿Te reconoces en alguno de ellos? ¿En más de uno tal vez? Para mí tener dinero significa tener libertad, libertad de elegir la vida que deseo y cómo utilizar mi tiempo. ¿Qué es para ti?


¿Crees que es lo mismo riqueza que prosperidad? ¿Crees que es posible tener mucho dinero y sin embargo no ser una persona próspera? Qué es lo que tú entiendes por prosperidad?

Dice Anthony Robbins que la diferencia que existe entre ser financieramente independiente y ser verdaderamente próspero es que la independencia financiera es un estándar económico que puede alcanzarse siguiendo una serie de estrategias y pautas adecuadas.

Sin embargo, la verdadera prosperidad viene no sólo de alcanzar los niveles económicos que deseas sino de experimentar el flujo de una absoluta independencia. Es una sensación de fortaleza emocional y felicidad, emociones de gratitud y de disfrute ante lo que tienes y la oportunidad de compartirlo con los demás.




La riqueza no deriva sólo de poseer una cierta cantidad de dinero, sino de la adopción de creencias nuevas y potenciantes. Cualquier tipo de éxito financiero que esperes, cualquier imagen mental que crees, se expresará en tu vida.

¿El dinero da la felicidad? ¿Qué crees? ¿De qué manera se relacionan las diferentes áreas de la vida con el dinero? ¿Sólo te encuentras mal o quieres mejorar financieramente? ¿Sirve de algo el dinero si el resto de tu vida es frustrante? La felicidad pasa por sentirnos bien y exitosos en las distintas áreas de nuestra vida.

Y para ello hemos de partir de un profundo conocimiento y aceptación de nosotros mismos. ¿Cómo está tu vida en estos momentos? ¿Te sientes satisfecho de tus relaciones? ¿De tu tiempo libre? ¿Sientes que te desarrollas y creces? ¿Y tu salud? ¿Te acompaña tu energía cuando emprendes un proyecto? La abundancia financiera para ser gozada en todo su esplendor debe ir unida a la abundancia en la vida.

Estos son los 4 niveles de abundancia que pueden aplicarse a todas y cada una de las áreas de tu vida:

1-Escasez: Estás pidiendo y/o esperando la abundancia. Tu focus está en lo que no tienes.
2-Trueque: Te sientes abundante si el mundo te recompensa de acuerdo con tus esfuerzos. (Si haces tal cosa obtendrás tal otra)
3-Atracción: Te sientes abundante y próspero; las circunstancias suelen serte favorables.
4-Abundancia total: Te sientes abundante y próspero a pesar de las circunstancias, incluso si son dolorosas.

¿En qué nivel vives habitualmente? ¿En cuál quieres y decides vivir?

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